viernes, 13 de enero de 2012

Una copa....de garrafón.

Ayer finalizó una nueva jornada de Copa del Rey que nos deparó el cuadro final que tendrá lugar en cuartos de final. Un cuadro con eliminatorias atractivas como el derbi local de Valencia entre el conjunto che y el Levante, el nuevo capítulo del sueño copero del Mirandés o una nueva versión del clásico del fútbol español entre el Real Madrid y el Barcelona.

No obstante, y pese a ser una competición que nos brinda un torbellino sin igual de sensaciones, no acaba de satisfacerme por completo. Quizás sea por la continua comparación continua que se establece con el formato de competición de la copa en otros países (sobre todo en Inglaterra) o por el poco respeto que muestran muchos equipos de nuestro fútbol por la Copa del Rey con actitudes de pasotismo total y un incomprensible popurrí de cambios en cada encuentro. Una competición antaño especial y apasionante pero que ha ido perdiendo atractivo en los últimos años hasta convertirse en “una distracción para la liga” para muchos conjuntos.


Y es que en mi opinión, este formato de eliminatoria a doble partido hace que gran parte de los equipos utilicen la Copa del Rey para dar descanso a sus titulares sabiendo que posteriormente tendrán un encuentro de vuelta para arreglar un hipotético desaguisado. Un sistema de competición implantado por gran parte de los “tiburones” de nuestro fútbol que no hace más que devaluar el torneo y que, para más inri, no es aprovechado por muchos equipos que caen frente a rivales de mucha menor entidad en una eliminatoria a doble partido y con la vuelta en su estadio.

Esta copa me ha servido para gozar del fútbol con equipos como el Mirandés o el Albacete y mi admiración por ellos es encomiable. Pero, ¿Qué debemos pensar los aficionados al ver a estos equipos ganar sus eliminatorias en estadios como el Madrigal o el Calderón donde han sucumbido grandes escuadras europeas? Sin desmerecer en absoluto la gesta de los equipos modestos, este tipo de SORPRESAS (obviamente, con mayúsculas) son producto del poco interés que muestran muchos equipos por la Copa del Rey. El mismo poco interés que mostraron los jugadores de la Real Sociedad al permitir que les endosaran 4 goles en siete minutos. Si estuvieran jugándose las semifinales de la Champions League seguro que hubieran sabido cómo detener esa sangría, ¿no?.


Como aficionado al fútbol a mí también me gusta disfrutar de los mejores jugadores y equipos. Pero esa misma afición me hace ver que si la copa fuera a un solo partido, Levante y Español hubieran caído ante dos conjuntos de segunda división como Alcorcón y Córdoba, así como el Athletic de Bilbao hubiera debido jugar una prórroga merecida completamente por el Albacete.  Y repito, me gusta el fútbol y disfruto con los grandes partidos. Pero no así. No a costa de poner palos en la rueda del carro más débil para que el bólido más rápido consiga la victoria conduciendo al ralentí.

En mi opinión, el formato que debería adoptar nuestra copa debería asemejarse al modelo inglés: partido único y sorteo de campo. Una competición que se mostraría linda, limpia y donde todos los equipos deberían ponerse el mono de trabajo. Y el que no lo hiciera, quedaría eliminado. No quiero ganadores por decreto, sino por mérito. Solo así se recuperara el verdadero espíritu de la expresión “noche copera” que hace años perdimos. 


domingo, 8 de enero de 2012

El ego como antítesis de la profesionalidad

Cuando escuchamos hablar a cualquier persona de fútbol y se les pregunta sobre los éxitos conseguidos por él o por su equipo, sus palabras suelen ir encaminadas hacia el valor del colectivo por encima de todo y por la unión del vestuario como motor principal de un conjunto. Un vestuario que cumple estas dos premisas es lo que solemos llamar un vestuario “sano”. No obstante, y aunque todos los que en él se dan cita son profesionales, no podemos olvidar que en los vestuarios de los grandes equipos confluyen tremendos jugadores con técnicos de renombre. Personas que, en algunos casos, tienen el ego acorde con la calidad y el talento.

Este virus que empieza por dañar la credibilidad de cualquier profesional y puede acabar terminando con la estabilidad de un vestuario entero se está propagando esta temporada en el vestuario de tres de los grandes de la Premier League: Manchester United, Chelsea y Manchester City. Equipos que, en los últimos meses, aparecen más en los tabloides por los roces entre los componentes de su vestuario que por los méritos deportivos. Una inestabilidad que les está llevando, junto a otros factores, a estar realizando una temporada decepcionante.

Quizás el caso que en la actualidad esté tomando más relevancia sea el de André Villas Boas en el vestuario del Chelsea. Un vestuario lleno de jugadores veteranos que sienten como una falta de respeto el trabajo que el técnico portugués está realizando para “rejuvenecer” la plantilla. Aunque quizás el episodio que evidencia de una manera más clara la rotura existente entre el entrenador y un núcleo duro del vestuario sucedió cuando los más veteranos del lugar quisieron realizar una comida de despedida para el “desterrado” Anelka en la ciudad deportiva y este acto de compañerismo fue vetado por Villas Boas. Un gesto que no gustó a los Lampard, Drogba, Terry y compañía y que, lejos de hacerle ganar respeto al portugués, le hicieron perder el poco crédito que hasta el momento ha acumulado. No hay que olvidar que llegó con la vitola de sucesor de Mourinho y los resultados no están siendo los esperados. Su equipo se encuentra en una decepcionante cuarta posición a 11 puntos del liderato y el juego exhibido no pasa de ser ramplón y sin demasiadas alternativas en ataque.


Otro equipo salpicado constantemente por este tipo de debates es el Manchester City. Un vestuario confeccionado a golpe de talonario donde convive una plantilla formada por 22 jugadores que se sienten titulares o, en su defecto, mejores que el que está jugando en su lugar. Un vestuario de por si complicado que está siendo llevado por un técnico con ciertas ganas de complicarse la vida. Así, no solo está desaprovechando la calidad de un jugador como Tévez sino que está demostrando una escasa ética profesional para tomar decisiones. Me resulta un tanto inquietante que un jugador como Balotelli que aparece fumando y con actuaciones irrespetuosas cada semana se haya ganado la confianza de Mancini y que Sergio Agüero o Dzeko deban pasar un examen de actitud y compromiso cada semana. La realidad es que el City está realizando una buena campaña en la Premier League aunque esperada por el potencial de su plantilla, pero ha caído eliminado a las primeras de cambio en la Champions League. Una eliminación que se fraguó en la derrota ante el Nápoles en San Paolo donde, por cierto, Agüero tan solo disputó 8 minutos del partido por decisión técnica de su entrenador. Una decisión incomprensible desde el punto de vista técnico y que, de haberse justificado por cualquier tema de indisciplina, no era el momento de tomarla. Primero el equipo debía clasificar y para ello necesitaba al Kun, luego ya vendría el correctivo.


Por otro lado encontramos al técnico más laureado de la historia de la Premier League, Sir Alex Ferguson. Un entrenador destacado por su longevidad en el banquillo de Old Trafford y por la infinidad de títulos que ha conquistado al frente de los red devils, pero también por la enorme cantidad de problemas que ha tenido con grandes jugadores que han estado bajo sus órdenes. Todavía se recuerda el “zapatillazo” que propinó a Beckham o los continuos rifirrafes que mantuvo con Cristiano Ronaldo.

Esta temporada la mano de hierro del técnico escocés ha recaído sobre Wayne Rooney. Unos problemas derivados de la no renovación del ariete inglés con el Manchester United y por las desavenencias que ambos han hecho públicas a lo largo de la temporada. La realidad es que ambos se necesitan: el ManU sin Rooney escasea de talento y capacidad goleadora, y Rooney necesita disputar minutos para demostrar que es uno de los mejores delanteros del mundo. Y con el Manchester United eliminado de la Champions League tras la debacle de Basilea y siendo segundos en liga tras su vecino de ciudad, Ferguson no está en situación de desaprovechar el talento del ex del Everton.


Con todo, jamás podremos saber cuáles son los problemas reales que suceden en cada vestuario. Aunque la única realidad es que todos sus componentes son profesionales y como tal, le deben rendir cuentas a la empresa. Salvo excepciones dramáticas, pienso que el hecho de anteponer el ego personal al bienestar del equipo es un error que se repite en demasiados equipos de fútbol. En mi opinión, las cosas no pueden zanjarse sin pensar las consecuencias y cada profesional debe cumplir su papel durante los 10 meses de competición. A final de temporada, cada cual que aguante su vela. Mientras dure la temporada, el equipo está por encima de todos. Entrenadores y jugadores.  

jueves, 29 de diciembre de 2011

Las estrellas del 2011 (Liga española)

A falta de pocos días para que finalice el año 2011 y teniendo en cuenta que, lamentablemente, no volveremos a gozar de la liga en nuestro país hasta bien entrado el 2012, llega el momento de hacer valoraciones de lo que ha sido el año en nuestro fútbol. Un año que nos ha deparado algunas sorpresas pero en el que, en general, pocos cambios ha habido en nuestro futbol. Estas son mis valoraciones.

 VILLARREAL CF // ATLÉTICO DE MADRID à Dos de los equipos que cada temporada apuntan a estar en lo más alto de la clasificación en los últimos años han sido, para mi gusto, dos tremendas decepciones a lo largo del año que nos deja. Más allá de la mala suerte, de las lesiones o de otros factores, la realidad es que ningún estamento de ambos clubes ha estado a la altura, especialmente en el último tercio del año. Villarreal CF / Atlético de Madrid à Dos de los equipos que cada temporada apuntan a estar en lo más alto de la clasificación en los últimos años han sido, para mi gusto, dos tremendas decepciones a lo largo del año que nos deja. Más allá de la mala suerte, de las lesiones o de otros factores, la realidad es que ningún estamento de ambos clubes ha estado a la altura, especialmente en el último tercio del año. 

La clasificación en liga de ambos está siendo bastante decepcionante, especialmente en el caso del Villarreal CF, y ambos han caído eliminados de la Copa del Rey ante equipos de Segunda División B. Ello unido a las seis derrotas cosechadas en la Champions League por el equipo amarillo y al constante ambiente de crispación que se instala anualmente a orillas del Manzanares han terminado por dilapidar el crédito de Garrido y Manzano antes de la llegada del nuevo año. Dos destituciones que, visto lo visto, llegan tarde. Nosotros somos simples aficionados pero la gente que trabaja en el club debería saber cuál es la situación y tomar decisiones para evitar los malos resultados deportivos, no para maquillarlos.


 DEPORTIVO DE LA CORUÑA à Uno de los históricos de nuestro fútbol abandonaba la Primera División la pasada campaña tras una última jornada en que tenía todo a favor para no caer al pozo. Actualmente se encuentra en una cierta mejoría gracias a la buena plantilla confeccionada en verano y es un serio aspirante a regresar a primera división. No obstante, que un histórico como el Deportivo que no hace tanto nos brindaba noches mágicas bajo los focos europeos siempre es una decepción.  

 MÁLADA // AHTLETIC DE BILBAO à Quizás los dos equipos que más en ascuas tienen a los aficionados de nuestro fútbol. Dos proyectos en proceso de maduración con vistas a crecer hasta cotas altísimas que, por el momento, cumplen las expectativas pero no las sobrepasan. El Málaga va olvidando poco a poco los años en que luchaba hasta el último segundo de la competición para no descender y la ciudad se muestra ilusionada con el proyecto del jeque. En mi opinión está cumpliendo las expectativas y está constantemente luchando por los puestos europeos, ya que pienso que la Champions League todavía es un objetivo demasiado utópico para ellos. No obstante, desde que Baptista sufrió la lesión que le mantiene varias semanas fuera de los terrenos de juego, el equipo ha experimentado un preocupante bajón en su rendimiento. Cierran el año mejor que el anterior, pero deben seguir trabajando en 2012.

Por su parte el Ahtletic Club de Bilbao cierra un año de cierta transición. Las elecciones del pasado verano propiciaron el fin de la era de Caparrós en el banquillo de San Mamés y seria Bielsa el que tomara el relevo. Como bien admite el técnico argentino la base sólida del equipo es fruto del trabajo del andaluz, pero el toque Bielsa siempre aporta un plus a los equipos que entrena. Poco a poco va viéndose el cambio y los resultados van acompañando. La clasificación la temporada anterior para la Europa League se ha unido a una primera fase impoluta esta temporada en dicha competición. Además, el equipo bilbaíno ha conseguido superar la peligrosa primera ronda de Copa del Rey y en liga va creciendo poco a poco. Muy buen año para los bilbaínos que deja abiertas las esperanzas para el 2012.

 LEVANTE UD // OSASUNA  à Sin duda, las dos grandes sorpresas de nuestro fútbol y los equipos en quien todos los “modestos” deberían fijarse. El Levante no sólo firmó la temporada pasada una segunda vuelta de escándalo que le permitió salvar la categoría de forma más o menos cómoda a pesar de cerrar el 2010 en una situación límite sino que este año está firmando una primera vuelta de escándalo situándose en puestos de Champions League, tan solo superado por el Barcelona, Real Madrid y Valencia. Y todo ello con uno de los presupuestos más bajos de toda la competición. Admirable, sin duda.


Por su parte, los navarros consiguieron salvar la categoría un año más al finalizar la temporada anterior y ello ya hace que sus objetivos queden cumplidos. No obstante, y tras desprenderse de 4 jugadores importantísimos para el equipo como Camuñas, Juanfran, Pandiani o Aranda, el Osasuna ha sabido rearmarse y crear un equipo realmente atractivo con hombres como Nino, Raúl García o Lamah, una de las sensaciones de la presente campaña. Con todo, cierran el año 2011 en una meritoria quinta clasificación siendo, igual que el Levante, uno de los presupuestos más bajos de la Liga.

 FC BARCELONA à Quizás pueda sonar tópico e incluso repetitivo e incluso habrá gente que piense lo contrario pero, bajo mi opinión, el mejor del presente año es sin ningún tipo de duda el equipo de Guardiola. No tan solo por el juego desplegado, que también, sino porque tras tres años el equipo sigue compitiendo como el primer día y ensanchando más su leyenda.
A lo largo de un año hay tiempo para todo. Para críticas, para que se abra el debate sobre un supuesto fin de ciclo, para que se especule con que el Real Madrid ha alcanzado e incluso superado el nivel del equipo azulgrana. Pero nada más lejos de la realidad. El Barcelona cerró la temporada anterior consiguiendo el tercer título de liga consecutivo y arrollando al Manchester United en la final de la Champions League. Y por si todo ello no fuera poco, esta temporada han refrendado los títulos conseguidos con las dos supercopas y el mundialito de clubes contra el Santos de Neymar. No hay dudas.


martes, 20 de diciembre de 2011

El debate del 9....¿o del 7?

El pasado domingo el Futbol Club Barcelona se proclamó vencedor de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA Japón 2011. Lo hizo después de haber disputado dos partidos plácidos ante un equipo brasileño y otro catarí cuyo resultado fue idéntico: cuatro goles a cero. Dos partidos que dejan patente una realidad y abren una tremenda duda en el seno del fútbol español.

Así, tras la consecución de este torneo, el Barcelona deja claro que es el mejor equipo del mundo y que no ha perdido el hambre de ganar, además de seguir postulándose como serio candidato a ser el mejor equipo de la historia.

Por su parte, la victoria en la semifinal disputada ante el Al-Sadd nos dejó una triste imagen cuando vimos a Villa sentado en el suelo con cara de circunstancias y afirmando lo que todos deseábamos que no sucediese; se había roto la tibia. Una inoportuna acción que depara en una lesión que mantendrá al “Guaje” varios meses fuera de los terrenos de juego y que hace peligrar seriamente su presencia en la Eurocopa de este próximo verano. Y, como ya sabemos, el fútbol no entiende de paciencia. Así que al día siguiente se hizo eco en todos los medios deportivos sobre el debate de quién debía suplir a Villa en la selección española. En este caso no hubo tiempo para el luto ya que, como suele decirse, a rey muerto, rey puesto.  


Con la lesión de Villa y la desaparición de Fernando Torres en las alineaciones de Villas Boas, parece ser que Llorente y Negredo se postula como dos arietes fijos en la convocatoria para la Eurocopa de este verano. El delantero del Athletic ya tuvo la oportunidad de acudir a la gran cita mundialista y sigue siendo un fijo en las convocatorias de Del Bosque. Por su parte Negredo cuenta con muchos minutos en su equipo y, de recuperar su mejor nivel, sería un recurso importante para la selección española.

Otro que ha dado un paso adelante con la desgraciada lesión de Villa ha sido Roberto Soldado. Aunque quizás los pasos más grandes hacia el objetivo de vestir la elástica roja los esté haciendo él mismo con sus goles con el Valencia. Este fin de semana sin ir más lejos se bastó él solito para sentenciar a un Málaga que siguió mostrando su peor cara esta vez en Mestalla. Personalmente creo que Soldado está haciendo méritos suficientes para entrar en la lista del seleccionador y más tras la grave lesión de Villa. No podemos subestimar al delantero más en forma del momento.


Un eslabón por debajo de Soldado se encuentra el grupo de David Barral, Agirretxe, y demás. Jugadores que están realizando una temporada notable con sus equipos pero que sería una sorpresa tremenda para todos si Del Bosque decidiera incluirlos en la lista de 23. No hay que olvidarse de Sergio García. El delantero del español atraviesa por uno de sus mejores momentos deportivos y está marcando las diferencias con su club. Además su experiencia con la selección –es uno de los campeones de Europa– le abala y su juego podría no desentonar con el estilo de la selección.

Y desde hace unos días se reabre también el debate más escabroso e inacabable de la historia de nuestro futbol. Si lo que nos hace falta es un delantero en forma, ¿por qué no llevamos a Raúl?. Debo confesar que soy un ferviente admirador de Raúl y que me parece uno de los mejores deportistas que ha dado este país. Y por ello mismo no se merece que éste absurdo debate vuelva a la actualidad. Porque todos sabemos que el momento de Raúl en la selección ya ha pasado y su presencia en la convocatoria no haría más que generar debate absurdo y farragoso alrededor del grupo. Porque Raúl, como tremendo deportista que es, está haciendo lo que más le gusta en este momento: disfrutando del futbol en una liga como la Alemana y demostrando a todo el mundo lo que un futbolista puede llegar a hacer si tiene una vida ordenada.


Es por ello que el nombre de Raúl no debe figurar en la lista de posibles en la lista de Del Bosque. Porque le hacemos un favor al propio jugador dejándole disfrutar de sus últimos años de fútbol lejos de los focos del debate. Un debate que sólo serviría para que sus admiradores hicieran leña del árbol caído si Raúl no es convocado y la selección hace un mal papel, o para que sus detractores se encargaran lastimosamente de dañar la imagen de uno de los mejores futbolistas de la historia de nuestro fútbol. Sea como fuere, Raúl no lo merece. Porque lo mejor para él y para la selección es que todo siga como está. 

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Disfrutemos del fútbol, ¿no?

El otro día estaba viendo la tele y una de las cadenas encargadas de la explotación de los derechos televisivos en nuestro país ofrecía un anuncio con imágenes de futbolistas sonrientes, árbitros bromistas, entrenadores alegres y demás. La frase que cerraba el spot publicitario rezaba tal que así: “Vamos a reírnos juntos, porque esto es solo un juego, ¿no?”.
Una frase que a priori parece lógica pero que a día de hoy me parece demasiado utópica en nuestro fútbol. Y es que actualmente tan solo el Levante y el Osasuna, que siguen a velocidad de crucero y demostrando que el trabajo bien hecho suele traer recompensa, el Sporting de Gijón que sigue a su ritmo consciente de hasta dónde pueden aspirar, y el Barcelona que tras las tres últimas victorias ha conseguido volverse a enganchar a la liga, parecen trabajar al margen de la crispación que parece haber rodeado nuestro fútbol. 


Empezando por el Real Madrid que hace dos semanas campaba triunfante en cada partido y que, tras el clásico, parece haber perdido la fe en aquellas armas que le llevaron al liderato.
Pasemos ahora a los equipos que ocupan las zonas europeas o aspiran a ellas. En este abanico de equipos encontramos al siempre cuestionado Valencia de Unai Emery cuya afición parece no conformarse con el tercer puesto pese a perder a Silva, Villa, Mata, Marchena y Albiol en los últimos años. Bien es cierto que el bagaje del Valencia en Champions ha dejado algo que desear estos dos últimos años, pero no debe resultar fácil trabajar con la presión continua de una grada eternamente descontenta.


Más abajo encontramos a un Málaga que, bajo mi opinión, debería acordarse más de lo mal que lo ha pasado estos últimos años y disfrutar del bueno momento del equipo. En cambio tan solo veo a un equipo preguntándose todavía donde han quedado los goles de Van Nistelrooy, lamentándose por la lesión de Baptista y donde tan solo la luz que está aportando el joven Isco parece marcarles el camino.
En una línea similar encontramos al Sevilla i al Athletic de Bilbao que, pese a estar realizando una campaña más que notable y ser serios candidatos para ocupar zona champions la temporada que viene, se empeñan en cuestionar lo que sus técnicos plantean en cada partido. Quizás en Nervión puedan exigir un poco más a sus jugadores, pero por lo que a los de Bielsa corresponde, no hay que olvidar que han cerrado la clasificación para la siguiente fase de la Europa League como primeros de grupo a falta de una jornada.
Mención aparte recibe lo que ocurre a orillas del Manzanares con el Atlético de Madrid. Hace años que se les puso el sambenito de “el pupas” y parece que pasaran otros tantos hasta que puedan demostrar lo contrario. Ya desde antes de empezar la liga parecía que la desmotivación y la duda se cernía sobre la figura de Gregorio Manzano y, pese a haber confeccionado una plantilla compensada y de calidad, la ansiedad se ha apoderado del equipo desde un primer momento impidiéndoles avanzar.


En un grupo situado en la parte media-baja de la tabla nos encontramos a equipos como el Espanyol, Rayo Vallecano, Betis, Mallorca, Granada o Real Sociedad. Equipos cuyo objetivo primordial es mantener la categoría y que, por cuestiones institucionales o meramente deportivas, no consiguen encadenar dos semanas de tranquilidad. Dos de los casos más significativos quizás sean los del Mallorca, que año tras año se ven obligados a reinventarse bajo mínimos por la venta de jugadores y por la escasez de fondos en sus arcas, o el Betis de Pepe Mel que, tras empezar la liga con cuatro victorias, parecen no soportar que la dinámica haya cambiado.
En la zona más sensible de la clasificación se encuentra, aunque parezca extraño, el Villarreal. No obstante, y analizando todo lo ocurrido, tampoco puede aspirar a más teniendo en cuenta que cuatro de sus mejores hombres la temporada pasada –Cazorla, Cani, Nilmar, Rossi– han desaparecido de la alineación por salida del primero, y lesiones de los demás. El submarino amarillo lleva jugando prácticamente toda la temporada con jugadores del filial y esa realidad no puede ser desestimada. A pesar de ello, los ánimos por el Madrigal se caldean más y más cada semana y la situación está tomando matices ciertamente desconcertantes. Bajo mi opinión, cuando en una temporada te sale todo mal, hay que ser realistas y conformarse con salvarla, y otra vendrá el año que viene.


Finalmente, los dos últimos lugares de la clasificación los ocupan el Zaragoza y el Racing de Santander. En estos dos equipos parece que sea más normal el descontento general por la situación en la que se encuentran, pero no sirve de nada lamentarse a mediados de Diciembre. La falta de gol de ambos equipos es la nota determinante que está manteniéndolos en el pozo de la clasificación pero las dinámicas cambian y los silbidos no ganan partidos, sino los goles.
Vamos a ser realistas y admitir que en el fútbol como en la vida, salvo excepciones, el mero paso del tiempo pone a cualquiera en el lugar que se merece. Y jamás nadie consiguió nada con los brazos bajados. Desde aquí un mensaje de ánimo para cualquier afición y, aunque el público es soberano, hay que intentar dejarse de crispación y dejar trabajar a los “artistas”. Que cualquier buen profesional es el primer interesado en que las cosas le salgan bien.    

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Europa empieza por el este

Siempre se ha dicho que para ganar la Champions League debías tener un muy buen equipo y, como en todo, una pizca de suerte. En una competición que suele dirimirse en el terreno de juego la suerte suele llegar –si llega– de dentro de los bombos que conforman el sorteo de la fase de grupos o de las diferentes eliminatorias.

No hace muchos años esta suerte y sobre todo en lo que a la fase de grupos se refiere no se valoraba tanto por el potencial de tus rivales, sino por la proximidad de los viajes que debían realizarse. Cualquier viaje largo hacia los países de Europa del este era considerado una maldición por cualquier entrenador y días antes de la expedición, los tabloides llenaban páginas con el plan de viaje del equipo que debía realizar tan “osada” hazaña.


No obstante, esta realidad ha cambiado debido al enorme progreso que en éstos países del este se ha experimentado en materia de fútbol y, por otro lado, al enorme ingreso que magnates de todas nacionalidades han decidido realizar en diversos equipos del viejo continente. Con todo, nos encontramos ante una Champions League más cultural que nunca y en seis de los ocho grupos que componen la primera fase de la competición encontramos uno o más equipos de esta parte del continente. Un dato relevante que ha permitido que esta Liga de Campeones se disfrute en prácticamente cualquier rincón de Europa. Demos un pequeño repaso.

En el grupo B encontramos al Trabzonspor y al CSKA de Moscú. El primero, un equipo prácticamente inédito en esta competición; el segundo, un veterano de guerra en lo que a batallas europeas se refiere. Ambos han realizado una fase de grupos discreta pero los dos afrontan la última jornada con la posibilidad de conseguir el pase a la siguiente fase. Así, con el Inter de Milán cumpliendo con su vitola de favorito y ya clasificado como primero de grupo, estos dos equipos se jugaran junto al Lille una plaza entre los mejores dieciséis del continente en una última jornada de transistores.

En los grupos C, D i E respectivamente encontramos al Otelul Galati, Dinamo de Zagreb y Genk. Tres equipos que llegaban representando a tres países como Rumania, Croacia y Bélgica que, pese a tener selecciones de cierto renombre en el panorama internacional, no consiguen meter asiduamente equipos de su nacionalidad en la máxima competición europea. No obstante, y pese a estar los tres eliminados de la competición, su participación ha sido muy dispar. Así, mientras el Otelul Galati ha pasado sin pena ni gloria por los campos europeos, el Dinamo de Zagreb ha conseguido que las miradas de medio continente estén fijas en ellos por el duro y bronco partido que protagonizaron contra el Real Madrid. Quizás les ha marcado en demasía el hecho de quedar encuadrados en un grupo demasiado fuerte con Ajax, Lyon y Madrid que les ha imposibilitado siquiera soñar con la Europa League.


Y, ¿qué decir del Genk? Básicamente que, aunque pueda sonar ventajista, es pieza clave en la eliminación del Valencia de la Champions League ya que el empate del equipo che en su feudo ha sido, finalmente, motivo suficiente para que los de Emery hayan quedado fuera. De todos modos, no hay que olvidar que no solo el Valencia pinchó en el estadio del Genk, sino que ni Chelsea ni Bayern Leverkusen han conseguido pasar del empate en tierras belgas. Sin duda, una participación discreta fuera de su estadio, pero clave en los partidos disputados en su casa.

Pasamos ahora al grupo G, quizás el grupo más peculiar por englobar a tres equipos de Europa del este: dos clásicos de los últimos años como los rusos del Zenit St. Petersburgo y los ucranianos del Shakhtar Donetsk, junto con el Oporto y el APOEL, el club chipriota que, a la postre, ha sido una de las sorpresas tremendas de la competición. Aunque quizás lo más sorprendente no ha sido la confección del grupo sino el resultado final ya que Oporto y Shakhtar partían como favoritos y han sido ambos eliminados a las primeras de cambio. Mención especial merece el equipo chipriota que partía como el gran desconocido de toda la competición y como el conjunto que todos querían enfrentar y se ha proclamado, nada más y nada menos, que campeón de su grupo.


Por último encontramos en el grupo H dos nuevos “desconocidos” en la máxima competición continental que no han encontrado quizás la oportunidad de demostrar su valía. Hablamos del Victoria Plzen checo y del Bate Borisov de Bielorrusia que, encuadrados en un grupo conjuntamente con Milán y Barça, no han podido más que ver como los dos grandes se disputaban el primer puesto del grupo relegándoles a ellos a un segundo plano absoluto. No obstante, es el Vitoria Plzen el que se ha impuesto en su duelo particular consiguiendo la plaza para la Europa League y el que quizás ha demostrado ser un equipo más compacto y dispuesto a competir frente a los mejores.


Con todo, una Champions con representantes de países muy diversos que, pese a no tener presupuesto y plantilla suficiente para hacer frente a los Barça, Madrid, ManU, Mián, etc, dan un toque de color precioso a esta competición. No deben olvidar aquellos que dicen no entender cómo estos equipos están en los bombos de la Champions League que algunos de estos equipos han debido superar tres rondas previas para poder pasear sus colores por el viejo continente. Por lo que a mi respecta, serán bienvenidos siempre. Un saludo. 

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Urko Pardo. La tierra prometida.

El fútbol siempre ha sido su mayor pasión y a ella ha dedicado su vida. Empezó su carrera como juvenil en el Anderlecht aunque terminó su formación como futbolista en la cantera del Fútbol Club Barcelona, donde llegó en el año 2002 para formar parte del plantel filial del equipo catalán. Dos de los cinco años que formó parte de la cantera barcelonista estuvo cedido en dos ilustres de nuestro fútbol como Cartagena y CE Sabadell. Posteriormente probó suerte en Grecia y Rumanía para finalizar su exótico viaje en Chipre. ¿Saben de quién hablo? En efecto, del portero del APOEL FC, Urko Rafael Pardo, portero belga/español hijo de padre vasco y madre gallega, que se ha dado a conocer ante toda Europa como portero del primer club chipriota que accede a los octavos de final de la Champions League en toda su historia.

Dicen que la vida suele dar segundas oportunidades y Urko Pardo puede dar buena fe de ello ya que, tras una trayectoria en el fútbol con más luces que sombras, al fin está cosechando los frutos del trabajo que se ha labrado en los pequeños coliseos del panorama futbolístico europeo. Un premio que se le fue denegado cuando, tras diversos años de formación en la cantera blaugrana, una inoportuna lesión en el ligamento cruzado de la rodilla truncó sus aspiraciones de subir al primer equipo. Son cosas del fútbol, es difícil que todos lleguen, yo tuve mala suerte a la hora de dar el salto. Me rompí el cruzado en el último entrenamiento de la temporada 2002 en un partido contra el primer equipo, en la etapa de Radomir Antic como primer entrenador. Me quedé un año parado. Tenía el contrato peparado para fichar por el primer equipo”, recuerda el actual portero del APOEL FC.



Este contratiempo unida a las malas expectativas que presentaba el fútbol español a la hora de apostar por la cantera, sobretodo en materia de porteros, hizo que Urko Pardo decidiera coger las maletas rumbo a Grecia, donde jugaría una temporada en el Iraklis FC, antes de fichar por el Rapid de Bucarest de la liga rumana. Tampoco le fueron demasiado bien las cosas en Rumanía y tras un año en que disputó muy pocos encuentros, volvió cedido a la liga griega, esta vez al Olympiacos de Ernesto Valverde. Tras un primer año en el equipo del Pireo en que estuvo un poco dubitativo, la temporada pasada firmó quizás uno de los mejores años de su carrera. Sus buenas actuaciones le valieron la confianza del equipo y el respaldo de la grada, pero todo ello no fue suficiente para llegar a un acuerdo con el club y plasmar su firma en el contrato. No obstante, esta circunstancia no preocupaba en demasía a un Urko Pardo que confiaba en el buen cartel que había adquirido en la liga griega para conseguir un puesto en cualquier otro equipo. Pero una vez más la mala fortuna pareció cegarse con el portero y las ofertas brillaron por su ausencia.

Hasta que llegó el “día D” de la carrera de Urko Pardo. Según explicó el propio futbolísta en una entrevista a Lavanguardia.com: “El entrenador (Ivan Jovanovik) me llamó al enterarse de mi situación. No les hacia falta portero, ya tenían tres, pero me dijo: ‘vente aquí que vamos a jugar la Champions y confiamos en ti’. Una llamada que parecía un sueño hecho realidad.





A día de hoy, unos 120 días después, Urko Pardo es el portero titular (tras la lesión de Chiotis) del equipo revelación de la Champions League. El APOEL de Nicosia inició su andadura en esta competición con el cartel de “invitado” colgado del cuello y actualmente lidera el grupo G a falta de disputarse tan solo un partido y ya tiene sellada la clasificación para la siguiente fase. Con Urko Pardo en la portería el equipo ha conseguido dos empates -frente a Oporto y Shaktar Donetsk, y una victoria en su estadio frente a los propios portugueses.

Los focos europeos brillan más que nunca en Nicosia y la carrera de Urko Pardo está recibiendo la luz que en su día le fue robada.